DOB 1MM Farola de Sustrato de Aluminio de 100-265V

El flujo luminoso (LM/W), como parámetro importante en el campo de la iluminación, juega un papel vital en el diseño y selección del Farola con sustrato de aluminio. Representa la medida de la luz producida por unidad de potencia y afecta directamente el rendimiento y la eficacia del sistema de iluminación.

El flujo luminoso es un concepto relacionado con la percepción visual humana, que se utiliza para cuantificar la cantidad total de luz emitida por una fuente de luz. La unidad de lumen (LM) representa la cantidad total de luz, mientras que la unidad de vatio (W) representa el consumo de energía. Por tanto, la unidad de flujo luminoso es lúmenes por vatio (LM/W), que es la cantidad de luz producida por vatio de energía consumida. Este indicador no solo refleja el brillo de la fuente de luz, sino que también está directamente relacionado con la eficiencia energética.

Para el alumbrado público, el aumento del flujo luminoso aporta muchos beneficios. En primer lugar, aumenta significativamente el brillo de la iluminación. Uno de los principales objetivos del alumbrado público es proporcionar suficiente luz para garantizar una buena visibilidad de peatones y vehículos durante la noche o en condiciones de poca luz. Las farolas con alto flujo luminoso pueden iluminar el entorno circundante con mayor potencia, lo que permite a las personas ver los objetos y las carreteras circundantes con mayor claridad.

Además, los aumentos en el flujo luminoso suelen ir acompañados de una mayor eficiencia energética. La eficiencia energética es una medida de cuán eficientemente se utiliza la energía, es decir, se consume menos energía proporcionando la misma o más luz. Esto es fundamental para reducir los costos operativos de los sistemas de iluminación y, al mismo tiempo, contribuir a los objetivos de sostenibilidad y reducir la dependencia excesiva de los recursos energéticos.

Las farolas de alto flujo también mejoran la visibilidad en entornos nocturnos y aumentan la seguridad general. En las vías urbanas y suburbanas, una iluminación adecuada es un factor importante para prevenir accidentes y delitos. Un mayor flujo luminoso significa una distribución de iluminación más amplia y uniforme, lo que reduce las áreas oscuras y las sombras, mejorando así la percepción de peatones y conductores.